Durante la Cuarentena. Mi casa es mi paraíso, mi palacio, mi refugio

Pandemia, estado de alarma, enfermos, infectados, hospitales, fallecidos... estas son las palabras más repetidas en estos días que nos ha tocado vivir. Nuevas situaciones, nuevas pautas.
Estamos en período de alarma. ¿Quién nos iba a decir algo así hace tan sólo 12 días?
Bien, antes de que caigamos en un estado de ansiedad, desánimo, apatía, dejadez y miedo por la incertidumbre ante el futuro, debemos poner en marcha toda nuestra energía en obtener lo más positivo de estas circunstancias que nos ha tocado vivir.

 Las personas que tienen que trabajar fuera de sus hogares durante estos días, como es lógico, tienen que hacer más hincapié en seguir a rajatabla las debidas precauciones dentro y fuera de sus casas, ya que aparte de las medidas tomadas al salir de casa, como la utilización de guantes o de mascarillas, en el interior de las viviendas también hay que seguir un protocolo de actuación , muy importante para evitar problemas derivados de esta pandemia. En mi caso en particular, el plan de actuación consiste en no salir más de una vez a la semana organizándome para ello lo mejor que puedo.  Debo decir que en mi casa la limpieza doméstica ha cambiado de forma radical, ya que, aunque no hubiera acumulación de suciedad, no suelo utilizar productos que desinfecten, ya que considero que no es necesario en una situación , que es muy diferente a la que tenemos en la actualidad.
Por otra parte, la vida que hay que llevar en estas circunstancias es fácil que te conduzca a un estado de inacción que repercuta en  tu salud, peso, estado de ánimo, energía, vibración, ... incluso en los proyectos que, sin ninguna duda, vamos a completar cuando todo termine.
Vayamos por partes, refiriéndonos a las diversas facetas de nuestro plan de acción, y aquí me expreso en plural pues considero que es una forma de sentir la unión con el resto de los seres humanos, y crear la sensación de que esa unión hace la fuerza. Todo es importante, y del estado de todos y cada uno y de esa buena voluntad necesaria para todo, resulta una sociedad más humana en la que demos lo mejor de cada uno.
El estado de alarma ha provocado que muchas personas tengamos que sufrir un aislamiento social que , según la actitud de cada uno, puede derivar en distintas consecuencias. Con el fin de que no nos lleve a un caos físico y mental , conviene que sigamos una pautas en nuestra vida cotidiana.

1. ORGANIZACIÓN 

• En lugar de levantarnos cada mañana a una hora diferente, intentemos levantarnos siempre a la misma hora, con un margen de un máximo de media hora de diferencia. Ni madrugar mucho  ni permitir que se nos peguen las sábanas.
• Establecer un horario con el que dividir la jornada en distintas franjas dedicadas al trabajo, ya se teletrabajo o tareas domésticas, pintura, decoración, etc
• Mantener los espacios ordenados, tanto en la cocina como en el baño, dormitorio, salón, despacho o incluso el pasillo, evitando que se acumulen las compras u otros elementos.

      2. RELAJACIÓN

• Inconscientemente podemos ir acumulando angustia, irritabilidad, apatía o falta de energía, que son todas ellas manifestación de ansiedad, que , aunque podamos considerar algo lógico y natural en esta situación que nos ha tocado vivir, no por ello hay que dejarse arrastrar por las sensaciones y emociones de estos momentos tan inusitados, como si fuera algo irremediable. Desde luego, aunque nos mantengamos informados de la evolución de la pandemia, es aconsejable limitar la cantidad e información sobre todo esto, ya que, por lo que he podido comprobar, incluso temas como la cosmética nos llegan relacionados con el coronavirus. Si, estamos de acuerdo en que los geles desinfectantes nos dejan la piel de las manos reseca y hay que utilizar más cantidad de crema de manos, pero de ahí a que las diversas secciones de las noticias tengan que publicarse necesariamente infectadas de tanta información acerca de la epidemia. Hay que marcar límites y no pasar demasiado tiempo conectado a las noticias, pues es posible que logren ir aumentando paulatinamente nuestro malestar, que al final puede derivar en un estado de alarma interior que de nada sirve, sino para desmoronar nuestra vida, que en cualquier etapa puede ser constructiva y tener su lado positivo. Hay muchas cosas que podemos hacer en estos momentos. Si, las hay y en el fondo todos sabemos que podemos lograrlo, salvar el bache para replantearnos muchas cosas. 
• Por otra parte es mu conveniente buscar un método de relajación como puede ser atención a la respiración, meditación, atención plena. Yo practico unos minutos de atención a la respiración y me da buen resultado. 
• https://youtu.be/gIxU3yy-F7E . Este enlace es uno de los muchos que podemos consultar en internet. 
• Vivir el presente cada día , cada hora y cada minuto. 

      3. ACCIÓN

• Por suerte, tenemos muchos medios a nuestro alcance para acceder a la información necesaria para poder actuar en diversos aspectos: 
•              - Cocinar. No caer en la dejadez de comer cualquier cosa, por apatía o desgana. Es el momento de cocinar con paciencia, con atención plena, a fuego lento, practicar recetas nuevas que tenías pendientes y comer saboreando cada bocado, sin prisa, exprimiendo los sabores y colores, aromas y texturas sin prisa y dando a la comida la importancia que realmente tiene. 
•             - Hacer ejercicio. Hay multitud de videos en youtube sobre cómo mantenerse en forma en casa. No es imprescindible ya que nuestra propia imaginación nos proporciona la manera de movernos para consumir calorías y alcanzar un bienestar que no conseguiremos si nos quedamos parados. Bailar, saltar a la comba, idear un tipo de aerobic de nuestra propia invención. En mi caso, tengo muchos recortes de revistas que me sirven a tal propósito y que he puesto en práctica... ¡¡¡más que nunca !!!

         4. MANTÉN UNA IMAGEN, NO TE ABANDONES

• Ya sabemos muchos de nosotros que vamos a estar solos o con personas muy allegadas, por lo cual parece que da igual arreglarnos o vestirnos , ya que es lo que solemos hacer para una vida en al aire, en el trabajo y el ocio y eso ahora lo tenemos que dejar para más tarde. 
• Lógicamente no vamos a ponernos unos taconazos para andar por la casa ni el vestido más entallado y fiestero que tengamos, pero de ahí a estar en pijama todo el día hay un abismo, que es el que vamos a llenar con prendas cómodas que nos hagan sentir que podrían visitarnos en cualquier momento sin tener que escondernos detrás de la puerta.
• En mi rutina he incluido ejercicios nada más desayunar. Hay personas que hacen ejercicio antes de desayunar pero en mi caso particular no lo puedo hacer, no me siento con fuerzas. Me pongo prendas deportivas que reservo para este fin, o al menos leggings y camisetas, que dejaré aparte para hacer ejercicio. Desayuno y al cabo de unos minutos realizo una sesión de ejercicios: este enlace me ha gustado bastante al respecto, y , si no, echémosle imaginación y adaptemos los ejercicios a nuestra preferencia y nuestra forma física. 
• Después de esta sesión de ejercicios matutina , que he descubierto que me deja relajadísima y curiosamente más activa que antes de hacer ejercicio, me ducho, poniendo énfasis en los tratamientos que he dado de lado durante un tiempo, como una crema anticelulítica y una antiarrugas para cuello-escote, que andaba llorando por los rincones del armario de baño porque no le hacía caso. 
• A continuación me visto con ropa cómoda, pero nada de estar en pijama, o en chandal, en todo otros leggings diferentes a los que uso para practicar ejercicio, pantalones de tela elástica, vaqueros cómodos y suaves, o de otro tipo que te hagan sentir bien pero sobre todo, que el espejo te devuelva una imagen agradable, no deslavazada y tristona, sino que te haga verte bien y preparada para enfrentarte a tu rutina de teletrabajo, tareas domésticas, o lo que tengas entre manos, a no ser que se trate de pintar o  grandes tareas de limpieza. Ponte un jersey, camiseta o blusa bonita, aunque no sea la última prenda que te compraste. Si habitualmente te maquillas hazlo aunque no te pongas el rojo de labios más intenso. Puedes ensayar el maquillaje NUDE (https://sevilla.abc.es/estilo/bulevarsur/noticias/belleza/como-conseguir-un-maquillaje-nude-o-efecto-cara-lavada/), que, quién sabe, en el futuro te puede gustar para salir también. También puedes ensayar cualquier tipo de maquillaje, al que quizá te vayas acostumbrando y que quizá te sirva para romper los viejos moldes de hábitos trasnochados que te encierren en lo mismo de siempre. 
• Péinate con un peinado cómodo, pero no vayas por la casa como si te acabaras de levantar. ¡No!, hay que levantarse con ánimo y amor propio

     5. ALIMENTACIÓN 

• Definitivamente en una situación como la que nos ha tocado vivir es uno de los pilares fundamentales. 

     6. AHORA PIENSA TAMBIÉN EN LOS DEMÁS.

• Estos momentos son buenos también para practicar la introspección y ver lo que hay en nosotros de empatía. A veces nos quejamos de que nos sentimos vacíos, con falta de cariño, incomprendidos, con falta de atención a nuestra maravillosa persona. Uno de mis grandes descubrimientos es el darme cuenta, no por mí misma sino por aquellos maestros, sabiduría, libros y páginas web que han llegado hasta mí. Yo tuve suerte de darme cuenta de todo lo que es realmente importante , aunque el mérito no es mío, y deseo con todas mis fuerzas que nos ocurra lo mismo a todos. Como es totalmente cierto que nunca hemos llegado a una meta, sino que es el camino lo que importa, busquemos el estado de paz mediante el amor al prójimo, despojándonos de todo aquello que enturbie nuestra paz natural y la de los demás. 

Por hoy no voy a publicar más,  continuaré compartiendo ideas con vosotros

Ánimo!!!